El uso del color permite delimitar un mismo espacio para definir sus diversas funciones o, por el contrario, crear una sensación de uniformidad.
Un elemento arquitectónico se puede realzar sutilmente, eligiendo tonalidades sobre tonalidades, o de forma brusca, con tonalidades contrastantes.
Para dividir las diferentes áreas de tu hogar
Consigue organizar la funcionalidad de los distintos espacios decorándolo con un color que contraste con los demás.
En una habitación
Para un cabecero original y personalizado, la pintura es la solución ideal. Permite delimitar el espacio de la cama en la habitación y darle color. Al aportar color directamente a tus paredes y en pequeños toques, puedes crear espacios de vida, pero también crear una decoración real.
En una cocina
Todo depende del tamaño de la cocina: si es grande, puedes pintar el techo y las paredes, pero si es bastante pequeña, es mejor pintar solo las paredes. Las cocinas abiertas han vuelto a estar de moda desde hace unos años. Puedes definir su espacio a través del techo o las paredes.
Otra forma de demarcar tu cocina es si está separada por vigas o paredes abiertas. Pintar estos elementos te permite estructurar el espacio de la cocina y separarlo del resto de tu salón de una forma original y colorida.
En una sala
Delimitar una oficina en una sala de estar. Los colores brillantes y atrevidos en una sala de estar no son para todos. Tenemos una solución para quienes aman el color, pero temen aplicarlo en grandes cantidades: crea nichos en colores vivos para alegrar tu salón. Un pequeño toque de color es suficiente para alegrar tu salón.
Si tienes chimenea, también puedes crear un relieve en tu salón vistiendo este último con una pared de color brillante o más suave. Deja que tu imaginación vuele. También es posible definir un área de oficina, un rincón de lectura o incluso un rincón de televisión, y para crear un efecto gráfico pintando parte de la pared o incluso la totalidad, ¡tú eliges!
